El Ministerio de Trabajo de la Nación decretó la conciliación obligatoria en el marco del conflicto que el SOMU mantiene con la empresa Fluviomar, que finalizó en piquetes frente a la embajada Venezolana en Capital Federal.

Los piquetes se realizaron ayer en Buenos Aires porque Fluvialba pertenece a la petrolera estatal venezolana PDVSA, que despidió a 46 trabajadores que reclaman diecinueve meses de salarios adeudados.

La conciliación obligatoria se extenderá por 15 días donde la cartera laboral intima a la empresa FLUVIALBA S.A., «a retrotraer la situación a la existente con anterioridad al inicio del conflicto, dejando sin efecto los despidos producidos por el plazo que dure el presente procedimiento conciliatorio, otorgando tareas en forma normal y habitual a todo su personal, como así también abstenerse de tomar represalias de cualquier tipo con el personal representado por la organización sindical y/o con cualquier otra persona».

Además del SOMU también estuvieron presentes en el reclamo Patrones Fluviales, Siconara, Marina Mercante y Maquinistas que también representan a los trabajadores.