Contactaba a menores por redes sociales. Se hacía pasar por un joven y las hostigaba solicitándole fotos y acosándolas. A una de las adolescentes la violó mientras que otras las hostigó a través de las redes sociales causándoles graves daños piscológicos. También abusó de sus dos hijastros de distintas parejas, también menores de edad durante varios años.
En Cañada de Gómez, el tribunal pluripersonal de Primera Instancia a cargo del debate compuesto por los Jueces Griselda Strólogo, Eugenio Romanini y Marisol Usandizaga condenó a Alberto Martín Moreno de 45 años a la pena de 25 años de prisión efectiva, por tres hechos de abuso sexual contra dos menores de edad de localidad de Totoras. Sin embargo fue absuelto por el beneficio de la duda por tres hechos de grooming.
El Fiscal Dr. Santiago Tosco le achacó a Moreno distintos hechos consumados en las localidades de Totoras cuando el imputado contactó a través de la red social Facebook a una menor de 14 años, utilizando el perfil de Martín Moreno donde comenzó a acosarla y a pedirle fotografías de ella: «sacate una foto así como estás», «hago lo que sea por una foto», «¿salís sola por el pueblo?», «¿Tuviste relaciones sexuales?», eran algunas de las preguntas intimidatorias que Moreno le hacía a la menor, que decidió bloquearlo de las redes.
Pero el imputado seguía acosándola vía Instagram, le pedía fotografías, le preguntaba si lo había denunciado y le decía que estaba cerca de su casa, por lo que la menor junto a sus padres solicitó una prohibición de acercamiento en marzo de 2019.
Situación similar fue la que se le achacó con otra menor de edad, también de Totoras de quien abusó sexualmente entre sus 14 y 15 años de edad entre los años 2018 y 2019. A la niña, la contactó por messenger y comenzó a hablarle, a pedirle fotografías y a acosarla a través del celular diciéndole que «le iba a enseñar cosas, cosas que ella no supiera y la engañó con su edad citándola a su domicilio donde abusó de la menor. Luego, bajo amenazas le insistió que volviera a su domicilio y que de no hacerlo, publicaría las fotografías que la víctima le había enviado. La situación se tornó mucho más difícil para la menor porque Moreno no paraba de hostigarla, incluso presentándose en la escuela a la que asistía la víctima: «quiero una foto de tu cola», «creo que
si no cambias no creo que terminemos bien» «si lIego a andar con algunas de tus amigas o con tu mamá, más vale que no te metas» «quiero el video nada mas» , «listo ya me enojé», la amenazó.
En mayo de 2019, Moreno buscó a otra víctima de 15 años de edad, de Totoras a quien envió mensajes durante varios días intentando contactarla y donde además generando temor en la adolescente, debido a que se presentaba en lugares donde ella se encontraba.
Moreno también acosó a una nena de tan sólo 11 años, a quien la buscó por Instagram desde un perfil falso en el que le pedía fotos :»Así, sacate una y me la pasas a escondidas», «me pasas y te paso una foto», «dale y no tengas vergüenza», «no te gusta que yo sea grande» ,»no le digas a tu mamá» «fijate sacate una solita», insistió durante varios días.
Graves abusos a los hijos de sus parejas
A Moreno lo imputaron por haber abusado sexualmente de otra menor, quien era hija de su ex pareja, a quien sometió desde los 7 años hasta los 17 en el domicilio en el que convivían en Totoras. El imputado aprovechaba las ocasiones en que estaba solo con su hijastra para abusarla bajo amenazas siempre. La joven vivó un calvario sometida a la voluntad y a la prepotencia cuando Moreno la violaba bajo amenazas con un cuchillo, la golpeaba con un cinto si se negaba, la agarraba de los pelos, la encerraba. Incluso cuando ya no convivían, seguía hostigándola con mensajes diciéndole que si no accedía , le diría a sus amigas que mantenía relaciones sexuales con él.
El fiscal también lo imputó por abusar sexualmente de el hijo de otra pareja desde sus 6 años hasta sus diez, mediante amenazas y el uso de la violencia física, golpeándolo y diciéndole que «si no se dejaba, su vida iba a ser de terror»
Los jueces finalmente aceptaron las imputaciones por los hechos de abuso, pero no así los de grooming, donde quedó absuelto bajo el beneficio de la duda. Los fundamentos de la decisión del tribunal se conocerán en los próximos días.
¿Qué es el grooming?
El grooming es la acción deliberada de un adulto, varón o mujer, de acosar sexualmente a una niña, niño o adolescente a través de un medio digital que permita la interacción entre dos o más personas, como por ejemplo redes sociales, correo electrónico, mensajes de texto, sitios de chat o juegos en línea.
Los adultos que realizan grooming suelen generar uno o varios perfiles falsos, haciéndose pasar por un niño, niña o adolescente, buscando generar una relación de amistad y confianza con el o la menor a quien quieren acosar. En nuestro país el grooming es unes un delito penado por la ley, que puede ser la antesala a otros delitos, como por ejemplo obtener material de abuso o explotación sexual contra las infancias, generar encuentros personales con las niñas, niños o adolescentes con intenciones de cometer un abuso sexual físico, la comercialización en redes de explotación sexual contra las infancias y adolescencias
Además, el grooming puede llegar a generar en las niñas, niños y adolescentes consecuencias psicológicas y físicas, derivadas de la manipulación por parte del adulto. En caso de conocer alguna situación similar o sospechas, existe la línea 137 para contactarse o la sede del Ministerio Público de la Acusación.
Qué opinas?