«Yo no quiero a nadie preso, quiero los huesos de mi hija», volvió a decir ante un juez, Alberto Perassi, padre de Paula, la joven desaparecida el 18 de septiembre de 2011. El pedido que hizo ante tantos jueces durante estos 11 años, antes era ante los ojos de Gabriel Strumia, quien cumple una condena de 17 años; pero esta vez no eran los ojos de quien fuera el amante de Paula y el principal acusado de la desaparición de la mujer, sino el hijo, Nicolás, de hoy 26 años.
La imputación es por falso testimonio y se remonta a las declaraciones que Nicolás realizó durante el juicio oral que se desarrolló en abril de 2019. La fiscal Melisa Serena le atribuyó haber afirmado una falsedad en su deposición bajo juramento de decir la verdad induciendo al error al juzgador que resolvió la absolución de los acusados en el marco de juicio oral por causa Paula Perassi. El mismo aconteció cuando el imputado insertó un falso testimonio en el marco del mencionado juicio. De esta manera, la Fiscalía le atribuye haber entorpecido el accionar de los jueces al momento de la valoración de la prueba.
El Juez de primera instancia Dr. Carlos Gazza tuvo por formalizada la audiencia imputativa dictando medidas alternativas a la prisión preventiva con restricciones por el plazo de 70 días, a saber: fijar domicilio, constituir garante, obligación de comparecer cuando sea solicitado, prohibición de salir del país, prohibición de acercamiento y contacto con los familiares de la víctima.
Qué opinas?