La comunidad estudiantil de la Universidad Nacional de Rosario (UNR) se reunió en la facultad de Medicina para expresar su rechazo a las amenazas dirigidas a la presidenta del Centro de Estudiantes de Humanidades y a un estudiante de Enfermería. Violeta Finocchiaro, una de las víctimas, denunció estas intimidaciones como parte de una persecución ideológica que evoca los momentos más oscuros de la historia argentina.

La entrega de una carta amenazante a otro estudiante refuerza la gravedad de la situación. Estos actos se producen en un contexto de creciente violencia política, donde el respaldo gubernamental a discursos que promueven el odio contribuye a la impunidad de los agresores.

Los estudiantes demandan justicia y seguridad, subrayando la necesidad de poner fin a esta ola de violencia que afecta a la comunidad educativa.